martes, 9 de agosto de 2011

Bombillas, consumo energía, iluminación

Cómo elegir tus bombillas de bajo consumo

La iluminación es quizá el más antiguo y extendido uso de la energía pero también donde mayores porcentajes de ahorro podemos conseguir. Como no siempre es fácil decidir qué bombillas de bajo consumo son las más adecuadas para cada uso, aquí van algunos consejos (que complementan la guía de ahorro lumínico).
• Tipo: Existen distintos tipos según tecnología.
- Las bombillas fluorescentes, generalmente conocidas como "de bajo consumo", consiguen un gran ahorro pero les cuesta encenderse (tarda unos segundos en dar toda su luz), por lo que son adecuadas en lugares donde la luz está mucho tiempo encendida.
- Las bombillas halógenas de bajo consumo ahorran mucho menos pero arrancan de forma instantánea, por lo que son adecuadas para lugares en que la luz esté poco tiempo encendida, como el baño o un pasillo.
- Por último, las LED ahorran mucho y el encendido es instantáneo, pero el precio es muy elevado, por lo que, de momento, son adecuadas para lugares donde la luz esté mucho tiempo encendida y sea muy difícil cambiarlas (por altura, acceso, etc.).
• Color: Elegir el color de la luz no es trivial ya que proporciona sensaciones totalmente distintas. Básicamente podemos distinguir entre:
- Luz cálida (más parecida a las bombillas convencionales, con un tono más rojizo), adecuada para relajarse, estar tranquilo, para el hogar.
- Luz fría (más parecida a los tubos fluorescentes industriales o a la luz del sol, un tono más azulado), más adecuada para ambientes dinámicos, como el trabajo.
• Potencia: Es importante observar la potencia, ya que podemos cambiar nuestra bombilla actual por otra de menor potencia equivalente y atribuir equivocadamente un menor rendimiento a la nueva bombilla. Para facilitar la tarea los fabricantes suelen poner la potencia equivalente (a una tradicional incandescente) en la caja, por lo que antes de ir a comprar debemos mirar la potencia de la que queremos sustituir. Si pensamos que actualmente tenemos poca luz debemos escoger un modelo que equivalga a una potencia superior. Para hacernos una idea, una tradicional de 100W puede ser sustituida por una fluorescente o LED de 20W o una halógena de bajo consumo de 50-70W.
• Forma: Actualmente existen modelos muy compactos o con distintas formas que permiten sustituir una tradicional en casi todos los casos. Cuando no dispongamos de mucho espacio sería bueno tomar medidas antes de ir a comprar.
• Duración: No todas las tecnologías, marcas y modelos duran lo mismo. Por lo que antes de comprar debemos mirar la duración, ya que cuantas menos veces las cambiemos menos residuos generaremos. Esta duración se mide generalmente en horas y, en ocasiones, en años. En este último caso hay que mirar la letra pequeña y ver que supuesto de uso han hecho, ya que normalmente es 1.000h al año (aprox. 3h al día), pero no siempre es así. Una bombilla tradicional suele durar 1.000h, una halógena de ahorro 3.000, una fluorescente 8.000h y una LED 45.000h.
• Regulación: Tenemos que tener especial cuidado cuando la bombilla vaya colocada en una lámpara regulable, en la que podemos subir y bajar la intensidad de la luz, ya que no todas las bombillas soportan esos sistemas (aunque existen bombillas regulables fluorescentes, halógenas de bajo consumo y LED).
• Recicla: No olvides tirar tu bombilla usada en un contenedor adecuado para su correcto reciclaje.

Energías renovables

Energía solar las 24 horas del día

Las ventajas de la energía solar como fuente renovable están fuera de discusión. Sin embargo, entre sus principales inconvenientes se encuentran la dependencia de las condiciones climáticas y horarias. Pero, ¿te imaginas poder disfrutar de esta energía durante todo el año, las veinticuatro horas del día y con independencia de si hay tormentas, viento o, sencillamente, esté nublado?
Esto ya es posible gracias a una empresa gallega -Solar PTS- que ha resuelto esta problemática mediante la combinación de dos tecnologías, la energía solar térmica y la bomba de calor. Sus paneles solares termodinámicos son capaces de captar el calor del viento, de la lluvia y del sol durante los 365 días del año. El sistema tan sólo se detiene cuando la temperatura exterior baja de menos 5 grados centígrados, por lo que la mejora de la eficiencia energética puede permitir ahorros del 80%.
¿Cómo funcionan estos paneles?
A diferencia de lo que sucede con los circuitos de los paneles solares clásicos, en lugar de circular agua, lo hace un gas refrigerante a 10 grados centígrados bajo cero, muy parecido al de los aparatos de aire acondicionado, cuyo punto de congelación oscila entre los menos 110 y menos 130 grados centígrados.
Es este gas, precisamente, el que permite que cuando se comprime y se vuelve líquido, pase por los paneles solares y se evapore por su baja temperatura. En esta reacción en el exterior, se absorbe el calor del ambiente por las dos caras de los paneles, incluso, aunque sea de noche o esté nevando. Cuando el gas calentado llega a un intercambiador de temperatura, se transfiere el calor al agua que se va a calentar, pudiendo utilizarla tanto para uso sanitario , la calefacción o, incluso, la piscina.
Otra de las diferencias respecto a los sistemas tradicionales se encuentra en el material de los paneles: construidos con aluminio anodizado, los paneles han visto reducido su peso significativamente, de modo que un panel de casi dos metros cuadrados no supera los ocho kilogramos de peso. A ello se suma la durabilidad y anticorrosión del circuito de gas, que evita su renovación por décadas.
Ya existen instalaciones de estos paneles en nuestro país y algunas de las experiencias realizadas hablan de ahorros anuales de más de 40.000 euros al año, evitando emisiones de 75 toneladas de dióxido de carbono. En cuanto a los periodos de amortización de las instalaciones, éstos no suelen superar los cuatro años, puesto que la inversión necesaria para una instalación en una vivienda se mueve en la horquilla de los 1.700 y 2.000 euros.
Esta tecnología aún tiene largo recorrido en ámbitos como la Administración Pública, en donde aún no ha despegado porque este tipo de paneles aún no se contemplan en la mayoría de los pliegos técnicos publicados en los concursos convocados.

Ciencia

Tinta solar: la pintura que genera electricidad

¿Te imaginas pintar las paredes, techos, tejados o ventanas de tu casa y conseguir energía al igual que lo hacen los paneles solares fotovoltaicos? La respuesta se encuentra en la tinta solar. Un spray que podría rociarse en diferentes lugares de la casa y a cambio los consumidores obtendrían energía. Empresas y grupos de investigación afirman que en pocos años se podrían lanzar al mercado modelos de tinta solar competitiva.
Energía solarEl progreso avanza a pasos agigantados. Tecnologías que hoy están poco desarrolladas como las pilas de hidrógeno o biocombustibles a base de algas, comienzan a tener su importancia. Este es el caso de la "tinta solar". Una pintura que al extenderse por las paredes de una casa, o al imprimirse en superficies tiene la propiedad de convertir la energía de los rayos solares en electricidad. Responsables de varias empresas, universidades y centros tecnológicos de todo el mundo especializados en la tinta solar apuestan por obtener la misma "fama" que poseen los paneles solares con células fotovoltaicas de silicio.
Ventajas e inconvenientes
Según sus impulsores, sus ventajas se encuentran en su precio y su respeto al medio ambiente. Por un lado, las actuales placas solares se hacen por medio de un proceso muy caro, además de necesitar cantidades importantes de energía. Por otro lado, cuando los paneles solares dejan de funcionar, deben ser reciclados de una manera adecuada, porque, de lo contrario, pueden llegar a ser muy contaminantes.
Sin embargo, hay un "pero". La energía obtenida por medio de los paneles solares tradicionales sigue siendo mucho más eficiente que la tinta solar. Algunas de las mejores células fotovoltaicas convencionales del mercado tienen una eficiencia de conversión superior al 25%, mientras que ciertos prototipos de tinta solar sólo se mueven en torno al 2% .

Avances
Los retos que persiguen sus impulsores son, entre otros, conseguir mayor eficiencia en la conversión de energía solar en electricidad. Un equipo del departamento de ingeniería química de la Universidad de Texas, con Brian Korgel como su mayor propulsor, ha desarrollado un método de fabricación 10 veces más barato que los actuales paneles y predice que podría estar listo para su comercialización en unos cinco años. Consiste en una pintura que posee un material semiconductor denominado CIGS (cobre, indio, galio y selenio). Aunque de momento no consiguen su objetivo (obtener una eficiencia del 10%), los avances van viento en popa. En sólo un año han pasado del 1% al 2%. Asimismo, el equipo considera las ventanas como un lugar idóneo para generar electricidad.
Las inversiones en esta nueva tecnología aumentan cada día. Empresas americanas y chinas, e incluso instituciones públicas como el Departamento de Energía estadounidense, han empezado a inyectar grandes sumas de dineros para mejorar la eficiencia de las tintas solares. No es de extrañar que muchos se suban al barco de la energía solar. Según, Nabuo Takana, director de la Agencia Mundial de la Energía, asegura que entre el 20% y el 25% de la electricidad mundial podría tener origen solar en 2050.

Ciencia

La energía solar termoeléctrica, un recurso brillante

La energía solar termoeléctrica aún contribuye muy poco respecto al total de energías renovables en España, pero se estima que una central eléctrica termosolar evita unas 2000 T anuales de emisiones de CO2 por cada MW instalado.

La Asociación Europea de Energía Solar Termoeléctrica prevé que en 2012 habrá instalados 4.425 MW en Europa, de los cuales el 80% estará en España.
¿Qué es la tecnología solar termoeléctrica?
La tecnnología solar termoeléctrica consiste en el empleo de la radiación solar que incide sobre la superficie terrestre para el calentamiento de un fluido.
Dependiendo de la temperatura que alcance el fluido se clasifica en:
- Solar térmica de baja temperatura, que se utiliza normalmente para el Agua Caliente Sanitaria en edificios.
- De media temperatura (80 a 250ºC), se utiliza para la producción de vapor en procesos industriales, producción de energía eléctrica a pequeña escala, desalación de agua marina o descontaminación de gases y aguas residuales.
- De alta temperatura (mayor de 250ºC) para producción de electricidad a gran escala.
Para alcanzar estas altas temperaturas se necesitan dispositivos como lentes o espejos que concentren la energía del sol.
Los sistemas de media y alta temperatura son de mayor complejidad, pues necesitan de un sistema de seguimiento para conseguir que el colector esté permanentemente orientado hacia el sol. La aplicación más común de estos sistemas es la generación de electricidad.
El aspecto más positivo de este tipo de tecnología es su capacidad de almacenamiento, el cual no se da actualmente en otros tipos de generación de energía como puede ser la energía eólica o solar fotovoltaica. De esta forma, permite a la central operar en períodos de ausencia de radiación solar.
Existen 3 tipos de sistemas de concentración: los colectores cilindro-parabólicos, los sistemas receptor central/centrales torre y los discos parabólicos. El tamaño de estos colectores y la temperatura que alcanza el fluido es diferente en cada uno.
España cuenta con una planta de 50 MW en Badajoz y 432 MW instalados en todo el país, lo que la hace líder mundial en producción de energía termoeléctrica. Estados Unidos está construyendo la mayor planta del mundo, de 1.000 MW, en California.
Por lo que podemos ver esta energía tiene mucho potencial. ¿Llegarán a cumplirse las estimaciones para 2012?

Transporte

Llega el avión solar

El desarrollo tecnológico nos permite desplazarnos por aire a múltiples destinos con gran velocidad, pero en la actualidad han aparecido diferentes voces que alertan sobre la contaminación que genera la aviación comercial. Como respuesta a estas exigencias, en el futuro podremos volar de forma más sostenible gracias al despegue de la aviación solar.
Avión Solar Impulse"Solar impulse" es el nombre que ha recibido el primer avión con propulsión de origen solar, capaz de dar la vuelta al mundo. Un avión que responde a un concepto revolucionario: desvincular la aviación de los combustibles fósiles con un nuevo planteamiento, tanto en la forma de construcción como en sus prestaciones.
Todo el proyecto gira en torno a la energía que necesita el avión para volar. Es sin duda un enorme reto, ya que al mediodía la superficie terrestre recibe en forma de energía luminosa el equivalente de 1.000 vatios por m2, lo que representa 1.3 CV. Distribuida sobre las 24 horas del día, la energía del sol sólo proporciona una media de 250 W/m2. Con 200 m2 de células fotovoltaicas de silicio monocristalino y el 12% de rendimiento total de la cadena de propulsión, la potencia media proporcionada por los motores del avión no alcanza más que 8 CV o 6 KW. Es casi lo mismo que tenían los hermanos Wright en 1903 cuando realizaron el primer vuelo motorizado. ¡Con esa energía optimizada del panel fotovoltaico ‘Solar Impulse' pretende volar día y noche sin combustible!
El avión tiene una envergadura gigantesca, equivalente a la de un Airbus A340, con un peso proporcionalmente minúsculo - 1.600kg.-. El prototipo HB-SIA presenta características de construcción y aerodinamismo nunca antes desarrolladas. La estructura está hecha con fibra de carbono, un material ligero y resistente. El resto de componentes del avión, desde la cadena de propulsión a la instrumentación, han sido construidos para ahorrar energía, resistir a las condiciones hostiles que sufren el material y el piloto en altitud y superar las dificultades que presenta el peso del avión por la fuerza de la resistencia al volar.
Aún así el mayor reto es para el piloto pues debe gestionar la energía de las baterías, en especial cuando la meteorología no acompaña.
Al margen del proyecto "Solar Impulse", creado por el suizo Bertrand Piccard, existen otros ejemplos de aplicación de la energía solar fotovoltaica a la aviación, como el prototipo británico "Sephyr-6", éste sin tripulación, y el trabajo que desarrolla el Instituto Tecnológico de Energías Renovables (ITER) de Tenerife (España).
Universitarios españoles desarrollan su propio prototipo
Otro ejemplo prometedor se está llevando a cabo en una universidad española. Alumnos de la Universitat Politènica de Catalunya (UPC) han iniciado la construcción del primer prototipo de avión solar de España desarrollado íntegramente por estudiantes. Se trata de una apuesta que confían en tener lista en unos meses, tras haber realizado ya los primeros vuelos de prueba.
Como en los casos anteriores, este prototipo denominado "Solar Endeavour" utiliza células fotovoltaicas en las alas del avión y cuenta con un sistema de gestión de energía que garantiza la autonomía del vuelo.
Los beneficios de la energía solar, si consigue introducirse en la aviación comercial, son evidentes para el medio ambiente. ¡Esperemos que estos proyectos piloto sean una realidad muy pronto!

Energía

Un paso adelante hacia el autoconsumo de energía

Si finalmente se aprueba en nuestro país el proyecto de Real Decreto de conexión de redes de baja potencia estaremos más cerca de poder producir energía para cubrir nuestras propias necesidades e incluso vender a la red lo que nos sobre. Será el punto de partida para la implantación de un sistema de generación distribuida en nuestro país.
Paneles solaresEl proyecto supone un paso adelante para que los dueños de pequeñas instalaciones, sobre todo paneles solares en tejados y de potencia no superior a los 100 kW, puedan consumir la energía que producen. Pero no sólo afecta a pequeñas instalaciones fotovoltaicas, como contemplaba el Real Decreto 1663/2000, sino que se amplía a todas las tecnologías renovables.
El proyecto de Real Decreto, además, reduce el tiempo de tramitación de las instalaciones menores de 10 kW a tres meses como máximo. En la actualidad, la tramitación de una instalación en cubierta de pequeñas dimensiones requiere los mismos pasos que una gran cubierta fotovoltaica de 2 MW.
Según la legislación vigente, el productor de una pequeña instalación, tiene que volcar toda la energía que produce a la red y a cambio, recibe una prima. Como novedad, la nueva norma contempla el desarrollo de un procedimiento para fijar el "mecanismo de venta". De esta forma, el particular puede calcular el saldo de energía producida y consumida para avanzar en la autosuficiencia.
Sin embargo, estos cambios no serán repentinos. El proyecto da un plazo de seis meses para el desarrollo de ese "mecanismo de venta" a partir de la aprobación de la nueva norma.
No obstante, es un avance. España seguiría así el ejemplo de otros países europeos en la simplificación de trámites para las instalaciones de poca potencia. En Grecia, desde el pasado verano, los procedimientos para los sistemas solares domésticos se han simplificado con el establecimiento de una ventanilla única, según PV Legal. También se han introducido otras mejoras para las aplicaciones en las islas autónomas y en los edificios históricos. En Eslovenia, desde septiembre de 2010, los sistemas menores de 1 MW ya no requieren la obtención de la licencia de obras.
Generación distribuida
Se pretende avanzar en el concepto de generación distribuida, es decir, la producción de energía eléctrica por medio de muchas pequeñas fuentes de energía próximas al lugar de consumo. Entre sus beneficios, están la reducción de las pérdidas en la distribución de energía por la red, la menor necesidad de desarrollar nuevas redes y, en general, una disminución del impacto de las grandes infraestructuras eléctricas en el entorno.
La electricidad producida en estas pequeñas instalaciones renovables podría alcanzar pronto la llamada "paridad de red", es decir, tendrá un coste similar la electricidad producida con ellas que la que suministra el sistema tradicional. Esto, junto con el recorte de trabas administrativas, será un incentivo al autoconsumo y un reto para el actual sistema eléctrico español.